La selección de directivos externos en las Empresas Familiares

Lo primero que hay que decir al respecto es que la incorporación de altos Directivos externos es una condición necesaria de realizar en todo proceso de profesionalización de la empresa familiar. En general y muy en concreto es muy conveniente realizar la incorporación de dichos altos Directivos a partir de mediados de la segunda generación. Cierto que hay casos y situaciones de empresa que pueden adelantarla o atrasarla, pero hemos de pensar que más pronto o más tarde hemos de incorporar directivos externos a la familia.

Ahora bien, mi experiencia me dice que dicha incorporación es muy frecuente, que la primera vez sea fallida, no solo por el normal desconocimiento de las familias empresarias, también por las consultoras que los seleccionan. Una razón por todos conocida y poco tenida en cuenta en dichos procesos de selección es el no encaje dicho Directivo externo en la cultura de la empresa familiar.

Por una parte las familias suelen seleccionar a dichos Directivos externos en situaciones de urgente necesidad y por otra, las consultoras de selección adaptan la búsqueda de su perfil en función de parámetros objetivos estándar típicos de cualquier empresa no familiar (sector de la empresa, dimensión de la misma, desafíos estratégicos, años de experiencia del candidato, etc.). Craso error en estos casos olvidar los parámetros subjetivos del potencial candidato. Igualmente craso error olvidar dichos parámetros subjetivos por parte de las familias. Mi experiencia me dice que cuando ambos chocan la selección fracasa.

Por su importancia y trascendencia para la profesionalización y competitividad de la empresa familiar volveremos sobre este crucial tema.

De momento no olviden lo comentado.

Fernando Nogales